Una pregunta a sus dos amigas qué ellas que harían.
No tengo mayor interes, pero están tan al lado, que aunque no quiera, estoy obligadísima a escuchar.
La prota explica que ha mandado dos mensajes al chico en cuestión. Uno para decirle que le ha encantado conocerle y que si un día le apetece tomar algo que la llame.
La respuesta de él ha sido: a mi tambien me ha gustado conocerte y sí, un día tomamos algo. Besos.
Una de las amigas (La del jersey rojo. Qué suerte que vuestros ojos se están librando de ver el jersey rojo de mi prima):
-Hombe tía, claro que le interesas. a mi me parece un mensaje super bonito (esto nos deja bien claro que con esa clase de jerseys no ha sido receptora de grandes mensajes de amor).
La otra (pelirroja y, gracias al cielo, vestida de negro) se rie:
-Bueno, bueno, tambien resulta que hay gente educada por el mundo. Y si te escriben, repondes. Pero por educación.
La interesada, asegura que si ella no le gustase, él, no tenía porque haber respondido, que si un mensaje no te interesa, no hay porque contestar. Que si ha contestado será por algo. Y sigue contando la historia. Después de una semana sin noticias de él, sin interes de él para ir a tomar algo, ella ha mandado un segundo mensaje.
Le puse: Hola, qué tal tu semana, yo trabajando, pero bueno, no entra mucha gente en la tienda asi que un poco aburrida. besos.
La morena: -Hombre tía, con eso le has querido decir bastante.
La pelirroja rizandose un rizo asegura: -Ya pero maja, te podía haber llamado. Y ese mensaje que le has mandado o se entiende o no se entiende...
Jo, casi no me aguanto la risa y me oyen.
Yo he preguntado mil veces ese tipo de cosas a mis amigas, y he seguido dándole vueltas en mi casa y en el metro. Mis amigas, tambien. Yo he sido la pelirroja y la prota de historias como esta. La del jersey cachuli nunca, eso que quede claro. Pero visto así, de fuera, es que es de señal y luces de neón churri.
Siguieron hablando. Yo me puse los cascos y me ví unos videos en el youtube. A la media hora larga, me los quité y seguian hablando de lo mismo.
Seguramente él ha pensado medio segundo en cada uno de sus dos mensajes, en total: un segundo entero ha pensado en ella.
Los hombres son mucho más simples: te quieren ver, te llaman. No te quieren ver, no te llaman.
Como en la foto:
Y deberiamos ser como ellos. Los queremos ver, los llamamos para vernos.
Ellos no entienden los silogismos, los paralelismos, ni los simbolismos. Entienden que si les cabe el coche aparcan, y sino, pues vaya putada, no cabe, a dar otra vuelta.
Y con los mensajes es igual. Hemos conocido a chicos que han querido salir con nosotras y nos lo han dicho, y nosotras hemos sido la que hemos respondido los mensajes de una manera ambiguísima. Asi que churri, está caro, aunque prefieras maquinar una interpretación. Lo que es no se interpreta, se ve, se siente, la verdad está presente. Pero lo que tiene la verdad tambien es que cambia, es que llega a ser verdad, que las cosas pasan pero tienen que hacerse. Y aquí, es en el único punto en la que una debería maquinar y ocuparse en qué se puede hacer con criterio, porque hay que tener en cuenta: la ley de gestación. Los niños, aunque queramos, tardan nueve meses en salir. Pues si queremos algo, manos a la obra. Ver friamente qué podemos hacer para que ocurra lo que queremos y entender que las cosas que queremos no se hacen solas. Pero esperar, a veces, está de más. Se llama al chico y se le dice: Churri, te apetece que nos tomemos unas cañas o nos hagamos un cine loco. Y le dejas sin words.
Porque si de verdad nos quisieramos, y nos tuviésemos respeto, como nos lo tendríamos, pues no supondría tanto para nosotras un no. Con estas preguntas siempre gana el encuestador. Si es sí, es bien. Y si es no (o un montón de excusas que no debes creerte porque todos sabemos que cuando alguien nos gusta, todo lo demás pasa a ser: todo lo demás), pues si es no, es maravilloso no perder tiempo de nuestra maravillosa y UNICA vida.
Asi que realismo y valor. Si queremos algo, debemos preguntarnos en serio qué podemos hacer. Y se hace porque estamos seguras de nosotras. No jugamos a que ocurra, lo hacemos. Y si una vez hecho no funciona, pues no funciona. No se acaba el mundo. Y no conseguir lo que uno quiere suele ser un maravilloso golpe de suerte, aunque a veces, en el presente no se tenga la suficiente perspectiva para verlo.
En fin, parece dificil, pero lo que te he dicho, ya lo sabes. Asi que hala, me callo.
Humphreys: ¿Acaso las cosas no son lo suficientemente tristes como para añadirles nuestra tristeza?
Nuestars reacciones negativas agrandan los problemas. Una cosa es un problema en sí y otra lo que nosotros problematizamos el problema. Por actitudes equivocadas y enfoques incorrectos de la vida, aumentamos nuestro sufrimiento.
No tiene que estar todo dispuesto en la vida para satisfacernos. Eso no es la vida. No todo el mundo tiene que satisfacer nuestras espectativas, ésa no es la realidad.
La existencia, la vida es un conjunto de sucesos agradables y desagradables, placenteros y displacenteros. Depende de la mente cómo los enfoca, los dirige, los instrumenta.
Depende de la actitud.
Asi que, llama de buen rollo y si te ves, guay, y sino, guay. No hay mayor drama que el que elijamos ponerle. Si no es nuestro chico, no es nuestro chico. Si saben vernos, nos veran, sino, ellos se lo pierden. Y no es consuelo, es realismo.
Las gomas que se estiran (si algo no es, pa que forzarlo) o se rompen o nos damos con ella en las narices.
Kisses.
Escrito por SilviNa Magari, que más de unas vez ha insistido en lo que, teóricamente, no deberia haber ni considerado.
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